El VAR fue el gran protagonista del Clásico de la Champions League femenina disputado entre el Real Madrid y el FC Barcelona en el Di Stéfano. Después de una gran primera parte de las blancas, en la que sometieron y anularon al conjunto culé, tras el descanso, el VAR entró para provocar que la árbitra finlandesa Lina Lehtovaara pitase un penalti surrealista provocado por Olga Carmona sobre Hansen.
Después de un rechace de Misa, que salió por alto a por un balón, éste quedó muerto en un lateral del área pequeña. Las dos jugadoras fueron a por él, pero no llegaron, siendo Rocío la que despejó a córner. Antes de que el Barça lanzara el saque de esquina, desde el VAR avisaron a la colegiada de un posible penalti, que finalmente pitó. Una acción en la que parecía que no había nada, pero que terminó desequilibrando un partido gobernado por completo hasta entonces por las de Alberto Toril.
Así fue la jugada del penalti con el que el @FCBfemeni logró empatar ante el @realmadridfem
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— DAZN España (@DAZN_ES) March 22, 2022
Alexia Putellas era la encargada de lanzarlo para batir a Misa y poner el 1-1 en el marcador. A partir de ahí, el Barça se creció y el conjunto blanco se hundió, dando como resultado un 1-3 que deja prácticamente al conjunto culé en semifinales, antes de disputar el partido de vuelta en el Camp Nou. Sin esa intervención del VAR, el resultado podría haber sido bien distinto, puesto que sobre el césped, era el Madrid quien mandaba.